Los maquillajes son elaborados a base de una emulsión del tipo aceite, agua y polvos de color, que de acuerdo a la densidad de la emulsión contenida resulta un maquillaje fluido, en barra o crema.
Un buen maquillaje en crema debe reunir las cualidades siguientes, textura cremosa pero no grasienta, que se pueda aplicar tanto en capa fina como de cierto espesor, sin que se note acumulación de maquillaje.
Dejar el cutis con un aspecto satinado, de manera que resista ligeras fricciones, la transpiración e incluso el contacto con el agua sin que se desprenderse.
El maquillaje facial en polvo o compacto no se usa de forma generalizada como el maquillaje en crema, se recomienda en cutis grasos, también cuando se necesite que el cutis tenga una apariencia mate, para evitar verse brillosa.
Los maquillajes en polvo en la actualidad se han perfeccionado demasiado, y lo podemos notar cuando el maquillaje en polvo se pueda aplicar con una esponja húmeda, los cuales poseen una permanencia espectacular.
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